Canta y baila como los dioses, tiene una belleza especial y es dueña de una sensualidad hipnotizante. Ella es nada menos que Beyoncé, una de las artistas más importantes y completas del mundo de la música.
Sin embargo, como le sucede a toda celeb, el tema de cómo mantenerse en forma es un desafío que debe afrontar día a día. Sus curvas exuberantes suelen sufrir considerables cambios gracias a la poca saludable dieta “yoyo”.
A sus 33 años, con una altura de 1,68 metros (5 ft 6 in) y un peso de 65 kg (143 lbs), esta bella mujer oriunda de Houston, Texas, no tiene un plan de alimentación definido, sino que desde su juventud a intentado bajar de peso con todo tipo de dietas. Algunas con éxito y otras no tanto, por lo que el efecto “yoyo” la ha perjudicado mucho.
Esto es por querer abusar de las dietas rápidas que ayudan a bajar esos kilos de más para cuando se acerca algún concierto o evento importante, pero cuando vuelve a comer normalmente –o con más permitidos de los que debería- vuelve al peso que volvía al comienzo o, aún peor, se la ve excedida de peso.
Antes de realizar cualquier tipo de descenso de peso siempre hay que ir a un Nutricionista o consultar a su médico de cabecera. Y la mayoría de ellos nunca están de acuerdo con este tipo de comportamientos y desaconsejan las dietas “yoyo”.
El secreto de la dieta de Beyoncé es que es muy pobre en calorías y los alimentos autorizados son los cereales. El problema es que cuando se relaja comienza a ingerir helados, hamburguesas y toneladas de calorías.
Pero ella tiene una as bajo la manga para la parte de sus glúteos y piernas. A pesar de tener una alimentación poco sana, el ejercicio para ella es fundamental. Aunque con su baile tonifica mucho, ya que durante un show puede quemar entre 2.000 y 4.000 calorías, no es suficiente.
“A diario subo escaleras, es lo mejor para las piernas y glúteos”, confesó la diva en cuanto a cómo se mantiene el resto del tiempo que no está arriba de un escenario. Beyoncé Knowles también agregó otro secretito: “¡Contraer los muslos a muerte! Cada vez que me ducho, contraigo los músculos de mis muslos y piernas durante 1 minuto. Una pausa de 20 segundos, y ‘hop2, empiezo de nuevo. Pruébalo tú también, te aseguro piernas de hormigón en 15 días!”.
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